miércoles, 27 de febrero de 2013

Y SI MIS IDEAS NO SON RENDIBLES...¿ABANDONO EL MUNDO EMPRESARIAL?


No tengo ni idea de cómo se puede pensar que un franquiciado NO es un emprendedor. ¿Acaso no invierte? ¿Acaso no arriesga su inversión?, (menos riesgo seguro…pero riesgo al fin), ¿Acaso no depende de sus ventas y de su capacidad para conseguirlas, aunque sea con el sistema de otro, para sobrevivir?¿Acaso no pierde si fracasa?
Jason Garcia, fundador de “el blog de la franquicia.”


A lo largo de todas las entradas de nuestro blog, te hemos ido incentivando a abrir tu negocio. Te hemos dado claves para que la pequeña empresa que tienes en tus manos prospere. Te hemos ofrecido consejos sobre cómo actuar, comportarte...Y sobre todo, ¡te hemos dado ánimos para ponerlo todo en práctica!

Aún así, una de las primeras cosas que debe de tener claro el emprendedor es la siguiente: aceptar el fracaso una vez se tenga en frente y dejar de dedicarle tiempo a una idea o negocio cuando objetivamente se observa que no tiene salida. Una vez hayas iniciado tu estudio del entorno y hayas determinado cómo vas a financiarte....Que ocurre si tú mismo llegas a observar que la idea no va a prosperar por el simple hecho de que no existe un buen nicho de mercado, y objetivamente, no va a llegar a ser rentable?

No todo acaba aquí. No todo es tener una idea y desarrollarla. Tal vez, lo tuyo no sea crear o inventar...Pero puedes abrir un negocio a pesar de esto.

¿Cómo te iniciarías en el mundo empresarial sin tener que crear un negocio en su totalidad? Una posible solución a esto son las famosas franquicias.

Estos contratos empresariales te ofrecen muchas ventajas en el caso de que poseas poca financiación, no tengas una idea clara de negocio o quieras entrar en un mercado dónde las marcas ya tienen una muy buena y estable imagen. Entre las múltiples ventajas que te pueden ayudar y atraer más, podemos destacar, por ejemplo, la obtención de conocimientos, asistencia y experiencia sin costes añadidos, y una buena imagen publicitaria, con una marca clara y incipiente reputación que ya es conocida por muchos consumidores. Es interesante recalcar, que, normalmente, al acudir a abrir una franquicia tus costes estructurales se disminuyen exponencialmente reduciendo también el tiempo de recuperación de la inversión, y además, las grandes cadenas, ya afianzadas en el sector, y con mucha experiencia, pueden darte formación personalizada. Otro punto a tu favor, es que existen muchísimas franquicias en muchos sectores, así que, no tienes porque sólo dedicarte al sector mayoritario. Escoge aquella que más se adapte a tus gustos, aquella con la que compartas su cultura organizacional...y forma parte de una gran marca, ¡poniendo tu granito de arena!

Aún así, antes de firmar un contrato, has de leer bien la letra. Por tanto, nosotras te aconsejamos que hayas estudiado muy bien la compañía a la que vas a pertenecer (visión, misión, trato con el medioambiente...), observar bien cuál de ellas se lleva un menor porcentaje de beneficios y, por último, tener claro que vas a depender de lo que tu empresa matriz dictamine.

No todo es innovar, ni todo es crear, ¿no? Pero si aún así, no quieres renunciar al mundo empresarial, ¡empieza por el mundo de las franquicias!

Finalmente, gracias, y ¡ENFÓCATE EN TU ÉXITO!

No hay comentarios:

Publicar un comentario